Cruceros Mediterráneo desde Génova

La importancia de Génova radica tanto en su papel comercial para el país como en su patrimonio histórico. En ella puedes encontrar algunas de las construcciones más imponentes, así como espacios perfectos para descansar antes de retomar el viaje en crucero. Su relevancia la convierte en una típica parada de crucero durante los viajes por el Mediterráneo occidental. Por ello, es muy habitual ver diferentes contingentes de viajeros el lugar donde atracan los cruceros en Génova, punto de partida para conocer una ciudad que tiene mucho que ofrecer.

Su clima templado, propio del Mediterráneo, recibe la influencia del Mar de Liguria y, por esto, presenta temperaturas generalmente suaves durante todo el año, con mayor cantidad de viento en verano. Esta ventaja climática hace que Génova pueda visitarse en cualquier momento del año. Es un destino perfecto para viajes breves de fin de semana y para viajes más largos en los meses de junio, julio, agosto, septiembre, octubre y noviembre.

Si viajas en familia podrás reservar un crucero todo incluido o con vuelos incluidos, para hacer del crucero con niños una experiencia más completa y enriquecedora. Si optas por viajar solo, en pareja o con amigos también podrás disfrutar diversos beneficios a bordo de tu barco que harán del viaje por el Mediterráneo occidental un gran recuerdo. Todo esto sin dejar de lado una de las principales ventajas de viajar en crucero: la posibilidad de encontrar increíbles ofertas. Los cruceros baratos están disponibles todo el año, solo hay que saber buscar. Para esto, te recomendamos prestar atención a los precios de última hora o hacer una reserva anticipada.

Una ciudad para conocer paso a paso

Génova se encuentra rodeada de colinas y montañas de gran altura que crean el entorno perfecto. Entre sus montañas más elevadas está el Monte Reixa, con 1.183 metros por encima del nivel del mar.

Si algo destaca de esta ciudad portuaria es su interesante cultura que incluye monumentos, iglesias y espacios al aire libre donde prima el arte y el entretenimiento. Sin duda, se trata de un punto clave en el viaje por el Mediterráneo y un paseo por sus calles es imprescindible en el itinerario.

Su particular belleza mediterránea la convierte en un destino ideal para viajes de fin de año, semana santa o navidad, ya que invita a celebrar los festivos en ambiente cálido y muy ameno.

Génova y su gran riqueza cultural

Desde el momento que atraca el crucero se puede sentir ese aire marinero tan característico de la ciudad. Sus callejuelas antiguas son perfectas para iniciar el recorrido por la ciudad.

Nada más llegar al centro se pueden admirar antiguos palacios medievales, como el cautivador Palazzo Ducale, que crea un contraste perfecto con los edificios contemporáneos que lo rodean. La catedral románica de San Lorenzo es otro de los monumentos más significativos de la zona por su imponente arte interior y por su fachada en blanco y negro.

Génova se enorgullece de contar con uno de los faros más antiguos del mundo. Se trata del Faro Linterna, que data del año 1543, y recuerda la importancia del puerto en la actividad del mar Mediterráneo.  En esto también destaca su famoso Puerto Antiguo, resultado del trabajo de Renzo Piano y centro de todas las miradas por la famosa "Biosfera", una esfera flotante con un invernadero en su interior.

Otros lugares para visitar son el Acuario de Génova, segundo más grande de Europa; la Galería Nacional del Palacio Spinola, los Rolli de Génova, el Palazzo Rosso y su barrio Castelletto, perfecto para una caminata lenta y contemplativa.

Llegar en crucero hasta Génova es también la excusa perfecta para degustar su exquisita gastronomía. Además de los típicos platos italianos, en este puerto puedes encontrar sabores tan variados que van desde la focaccia y el stoccafisso hasta el cappon magro, una ensalada de pescado que nubla los sentidos.

En tu viaje por el Mediterráneo descubre la cultura y riqueza de Génova, ciudad que no pierde nunca su encanto y sabe cautivar con sus múltiples atractivos.