Marsella, que es la segunda ciudad más grande y poblada de Francia después de París, es una de las escalas más fascinantes que podemos encontrar en cualquier itinerario de cruceros por el Mediterráneo Occidental. Con una historia que se remonta a más de 2600 años, esta ciudad portuaria, que fue fundada por los griegos, se alza sobre un paisaje costero impresionante, donde los acantilados y la geografía accidentada dominan las vistas espectaculares del paisaje.
El clima estable y templado que ofrece durante todo el año hace que sea un destino ideal que visitar en cualquier época, y su gastronomía, que suele estar centrada en pescados y mariscos frescos, es otro de sus grandes atractivos. Por supuesto, también contiene impresionantes lugares turísticos, que resultan importantes desde el punto de vista histórico, artístico y cultural.
Para ayudarte a descubrir los lugares más imprescindibles e interesantes que ver en los cruceros desde Marsella, hemos hablado con los expertos de Cruceros Mediterráneo. Si vas a visitar esta ciudad portuaria en un solo día, te recomendamos seguir leyendo para planificar tu ruta por los principales puntos de interés. ¿Nos acompañas? Toma papel y boli para anotar tus lugares favoritos y ¡vamos allá!
El Vieux Port, el corazón de la ciudad
El primer lugar que debes ver en Marsella es el Vieux Port, el antiguo puerto de la ciudad y una de las zonas más animadas de la misma. A pesar de que, en la actualidad, es un puerto deportivo, sigue conservando sus encantos originales con sus antiguos talleres, el Faro de Santa María y el edificio del Ayuntamiento, un fabuloso edificio de estilo Barroco que fue erigido en el año 1673 y que fue designado monumento histórico por el Gobierno francés en 1948.
Se trata de un sitio perfecto para pasear, disfrutar de un desayuno en una de sus cafeterías y ver cómo las barcas van y vienen. Además, si cuentas con algo más de tiempo, desde aquí puedes embarcarte en un paseo en barca al amanecer o al atardecer para disfrutar de las espectaculares vistas de la costa.
La Catedral de la Major, el templo más importante de Marsella
Uno de los templos más imponentes de la ciudad es la Catedral de la Major, un edificio que entremezcla algunos estilos arquitectónicos, como el neorrománico y el neobizantino y que fue construido alrededor de 1850. Su arquitectura destaca por el uso de piedras rosadas de La Couronne, mármol blanco de Carrara, piedra verde de Florencia, ónice de Italia y Túnez, y mosaicos de Venecia. Es decir, que está construido con materiales de primera calidad.
Con una longitud de 146 metros y una altura de casi 70 metros, es, sin duda, una de las catedrales más grandes del mundo. Su interior es igualmente impresionante, con cúpulas majestuosas y esculturas de Cristo, los apóstoles San Pedro y San Pablo, y santos de la Provenza, entre muchas otras. Recomendamos admirarla por el exterior, pero también entrar en su interior.
El barrio de Le Panier, el alma de Marsella
Para los amantes de las calles con historia, Le Panier es una parada obligatoria. Este es el barrio más antiguo de Marsella y se distingue por su entramado de calles estrechas, pequeñas plazas y casas de colores típicas de la Provenza. Aquí encontrarás tiendas de artesanía, galerías de arte y cafeterías con mucho encanto, ideales para pararse un segundo a disfrutar del ambiente bohemio y urbanita de esta ciudad.
El Boulevard Longchamp y su espectacular palacio
Otro de los puntos más interesantes que puedes ver en Marsella en un día de crucero es el Boulevard Longchamp, una avenida elegante que conduce hasta el majestuoso Palacio de Longchamp. Se trata de un complejo arquitectónico que está formado por dos edificios unidos que quedan por una columnata semicircular y alberga, en su interior el Museo de Bellas Artes y el Museo de Historia Natural, dos de los más importantes de la ciudad. Frente a la columnata, se encuentra una impresionante fuente monumental de estilo barroco que embellece aún más el entorno.
El Fuerte de Saint Jean, una fortaleza histórica
Ubicado en el Vieux Port, el Fuerte de Saint Jean es uno de los puntos más emblemáticos de la ciudad y uno de los principales lugares turísticos que ver en Marsella. Fue construido en el siglo XVII por orden de Luis XIV, el famoso «Rey Sol», como homenaje a la orden de los Hospitalarios de San Juan de Jerusalén. Sin embargo, sus orígenes se remontan al siglo XIV, cuando se erigió la primera estructura defensiva en este lugar.
Más tarde, en el Renacimiento, se añadió la gran torre cuadrada que hoy domina el conjunto. Desde sus murallas, puedes disfrutar de unas vistas panorámicas espectaculares de la ciudad, el puerto y la Basílica de Notre Dame de la Garde, de la cual vamos a hablar a continuación.
Notre Dame de la Garde, el icono de Marsella
Situada en la cima de una colina a 150 metros sobre el nivel del mar, la Basílica de Notre Dame de la Garde es, sin duda alguna, el principal símbolo de la ciudad. Construida en el siglo XIX en estilo neorrománico y neobizantino, destaca por estar construida con materiales, como el mármol y pórfido italiano, así como por la gigantesca estatua dorada de la Virgen María que corona el campanario. Su interior es una obra maestra del arte religioso, y las vistas que ofrece de la ciudad y del litoral marsellés son realmente inolvidables y que te permitirán sacar fotografías altamente instagrameables o para incluir fotografías espectaculares en el álbum de tus viajes.
Castillo de If, la prisión legendaria
Si buscas cosas que ver en Marsella que incluyan una experiencia inolvidable, te recomendamos un paseo en barca desde el Vieux Port hasta el Castillo de If. Esta fortaleza, que fue construida en el siglo XVI con el objetivo de proteger la ciudad de los ataques por mar, se convirtió en una prisión en el siglo XIX. Su aspecto medieval, sus torres defensivas y su faro lo convierten en una de las cosas interesantes que ver en Marsella. Además, ofrece panorámicas inigualables de la ciudad en la distancia, perfectas para capturar fotografías memorables.
En definitiva, podemos decir que Marsella es una ciudad espectacular y repleta de de lugares históricos, lo cual resulta ideal para disfrutar de una escapada en crucero. Si tienes la oportunidad de visitarla, no dudes en recorrer sus calles, descubrir sus monumentos y dejarte sorprender por su encanto mediterráneo.
Sin duda, te recomendamos pasear por el Vieux Port, explorar el Barrio de Le Panier o admirar las vistas desde Notre Dame de la Garde. Esta ciudad tiene algo especial que ofrecer a los cruceristas que quieren descubrir esta ciudad. Así que, si te preguntas qué ver en Marsella en un día, esperamos que este artículo te haya ayudado a encontrar algunos de tus lugares favoritos.
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