No cabe ninguna duda de que la región del Mediterráneo es una de las zonas más visitadas por turistas llegados de todos los rincones del mundo debido a que, a pesar de su tamaño es relativamente pequeño, sus aguas bañan numerosos países con idiomas radicalmente diferentes que ofrecen la oportunidad de descubrir tradiciones, así como manifestaciones artísticas y una herencia cultural que resulta muy atractiva.
Toda esta tradición y mezcla de culturas que ha tenido lugar con el devenir de los siglos se ha plasmado en la configuración histórica de la mayoría de las ciudades del Mediterráneo, donde sólo en su trazado urbano podemos diferenciar cómo se han desarrollado a lo largo de las distintas épocas y donde podemos encontrar rasgos medievales, clasicistas, barrocos, modernistas, vanguardistas y actuales.
Al bajar a pie de calle y descubrir estas ciudades desde una perspectiva humana, podemos decir que, al pasear por las calles de muchas de ellas, podemos descubrir todo tipo de muestras de patrimonio que es producto de las diferentes épocas artísticas y que se plasman en forma de edificios, monumentos, esculturas, pinturas, etc.
¿Y qué mejor manera de descubrir todo este atractivo que en un crucero por las ciudades del mediterráneo más icónicas? Sigue leyendo para descubrir cómo puedes descubrirlas mientras disfrutas de las comodidades y de las ventajas que supone surcar las aguas a bordo de los minicruceros por el Mediterráneo que puedes reservar a través de nuestro portal, Cruceros Mediterráneo. ¡Sigue leyendo y descúbrelas a través de nuestro artículo!
Roma, una de las ciudades del Mediterráneo más históricas
Ningún recorrido por las ciudades del Mediterráneo estaría completo sin pasar por Roma, la capital de Italia y uno de los destinos más emblemáticos del mundo entero, ya que es un auténtico museo al aire libre donde puedes encontrar ruinas históricas y obras de arte en cada rincón. Allí, te aconsejamos visitar Coliseo y el Foro Romano, testigos de la época imperial, pero también la Basílica de San Pedro, en la Ciudad del Vaticano y sus museos, donde se encuentra la Capilla Sixtina, que alberga a su vez algunas de las obras maestras de Miguel Ángel.
Al recorrer sus calles empedradas, te encontrarás con fuentes barrocas, plazas repletas de vida y de turistas y todo tipo de monumentos, como la barcaza de Bernini, el Ara Pacis, la Columna de Trajano o el famoso Panteón del emperador Adriano. No olvides pasear por la zona del Trastévere, un barrio bohemio y con mucho encanto que te permitirá disfrutar del auténtico ambiente romano y disfrutar de una copa, así como de los famosos aperitivos italianos.
Ciudades icónicas de la costa mediterránea: Nápoles
Al sur de Roma, se encuentra Nápoles, una ciudad caótica que es un mosaico de estilos arquitectónicos y culturales diferentes y que destaca por sus paisajes costeros que llevan, como telón de fondo, la silueta del Monte Vesubio. Te recomendamos explorar su casco antiguo, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, pasear por sus calles estrechas, visitar sus iglesias históricas, así como sus catacumbas, como las de San Genaro o las de San Gaudioso.
Pero Nápoles no es solo historia, sino también gastronomía, ya que se considera el mejor lugar del mundo para comer las famosas pizzas napolitanas. Además, desde Nápoles se puede acceder fácilmente a las fascinantes ruinas de Pompeya y Herculano, ciudades romanas que fueron sepultadas por la erupción del Vesubio en el año 79 d.C., así como a la espectacular Costa Amalfitana. Sin duda, una de las ciudades de la costa mediterránea más icónicas es Nápoles.
Atenas, la cuna de la civilización griega
Atenas es una de esas ciudades del Mediterráneo en las que también se respira historia en cada esquina. Considerada la cuna de la civilización occidental y de la democracia, en Atenas encontrarás la oportunidad de visitar las ruinas de la Acrópolis, uno de los complejos arqueológicos más icónicos del mundo y un recordatorio del glorioso pasado de la Grecia clásica. Entre sus templos, no te puedes perder el Partenón, el Erecteion y el diminuto templo jónico de Atenea Niké.
Te recomendamos pasear por los barrios de Plaka y Monastiraki te permitirá descubrir las pintorescas callejuelas del casco antiguo de la ciudad, así como también podrás visitar los mercados tradicionales y las tabernas donde probar la deliciosa gastronomía griega. Sin duda alguna, es una de las ciudades más icónicas de la costa mediterránea.
Barcelona, otra de las ciudades del Mediterráneo más reconocibles
Barcelona es una de las ciudades del Mediterráneo de mayor tamaño, más animadas y cosmopolitas, ya que es famosa por su arquitectura modernista y su animada vida cultural. La obra del arquitecto Antoni Gaudí, que se plasma a través de la icónica Sagrada Familia, el Parque Güell y la Casa Batlló, le otorgan a la ciudad una personalidad única y un encanto especial que no te puedes perder. Te recomendamos, además, visitar su animada vida en Las Ramblas, su histórico Barrio Gótico y la Barceloneta.
Además, la ciudad ofrece la oportunidad de degustar ricos platos con ingredientes típicos del mediterráneo, como la Escalivada, el Suquet de Peix, la Escudella i Carn d’Olla, la Coca Catalana o la Crema Catalana. Todo ello hace de Barcelona una de las ciudades más icónicas del Mediterráneo.
Ciudades icónicas de la costa mediterránea: Valencia
Valencia es otra joya del Mediterráneo, conocida por combinar tradición y modernidad. Te recomendamos visitar su impresionante casco antiguo, donde destacan la Catedral y el Mercado Central, así como las torres de Serranos y las de Quart, puertas de acceso a la antigua Valencia medieval. Sin embargo, también te recomendamos dejarte caer por la Ciudad de las Artes y las Ciencias, un complejo arquitectónico neofuturista hace de esta una de las ciudades más icónicas de la costa mediterránea.
No puedes dejar de probar la auténtica paella valenciana, uno de los platos más representativos de la gastronomía de la región y de toda España. Además, sus playas (La Malvarrosa, la Patacona y Pinedo) y su animado puerto hacen que sea perfecta para ti si lo que buscas es disfrutar del mar y del buen clima del Mediterráneo.
Dubrovnik, una pequeña ciudad que no pasa inadvertida
Conocida como la «Perla del Adriático», Dubrovnik es una ciudad medieval amurallada muy reconocible que tiene la cualidad de cautivar a todas aquellas personas que la visitan. Sus murallas perfectamente conservadas, sus calles de piedra pulida y sus edificios de techos rojos ofrecen un escenario pintoresco que casi parece sacado de un cuento de hadas.
De hecho, pasear por su casco antiguo, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es como viajar en el tiempo. Además, la ciudad es famosa por haber servido de escenario para series y películas, como Juego de Tronos, lo que la ha convertido en una de las ciudades más icónicas del Mediterráneo desde hace unos años.
Marsella, otra de las ciudades icónicas de la costa mediterránea
Marsella, que es la segunda ciudad más grande de Francia y uno de los puertos más importantes del Mediterráneo, también combina a la perfección tradición y modernidad. Sus barrios históricos, como el Panier, contrastan con el moderno puerto y su animada vida urbana. No puedes perderte la Basílica de Notre-Dame de la Garde, que ofrece unas vistas panorámicas privilegiadas de la ciudad y del mar y una de las principales razones que hace de Marsella una de las ciudades más icónicas de la costa mediterránea.
Por supuesto, Marsella también es conocida por su rica gastronomía, gracias a platos como la bullabesa, una sopa de pescado y marisco típica de la región, así como la Tapenade o la Nourride. Sin lugar a dudas, estas son algunas de las ciudades del Mediterráneo más icónicas que puedes descubrir a bordo de un crucero.
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