La experiencia a bordo de un crucero puede variar de manera considerable entre un pasajero y otro, aunque se trate del mismo barco. Esto es debido a varias cuestiones que tienen que ver con el tipo de billete, con los servicios contratados y, por supuesto, con el tipo de camarote. Los tipos de camarotes en cruceros influyen mucho en la experiencia que tiene el usuario, puesto que se trata de una zona del barco en la cual el pasajero pasará un tiempo considerable del viaje —y es que hay que tener en cuenta que la mayoría de los cruceros suelen tener una duración media de dos semanas, a excepción de los mini cruceros—.
En este artículo vamos a explicarte cuáles son los diferentes tipos de camarotes y qué camarote elegir en un crucero en función de tus necesidades. Si hasta la fecha no has viajado nunca en crucero, te recomendamos que leas este artículo.
Cómo son los camarotes de un crucero
Los camarotes de un crucero son como las habitaciones de un hotel, pero en altamar. Podemos encontrar camarotes más pequeños, cómo los interiores y camarotes más grandes, como los de tipo suite. Ten en cuenta que no todos los tipos de camarotes son iguales. En el caso de los cruceros de lujo, los camarotes suelen tener unas características similares entre sí que destacan por la amplitud, la diversidad de servicios y por las vistas. Estos son los diferentes tipos de camarotes que podemos encontrar en la mayoría de los cruceros.
Crucero: camarote interior
En los cruceros, camarote interior y camarote exterior son los más abundantes, aquellos que ocupan la mayor parte de la cubierta del barco. El camarote interior de un crucero es aquel que resulta más económico puesto que es el más sencillo y el que menos prestaciones tiene. El nombre de camarote interior se debe a que se encuentra en el interior de la cubierta, es por esta razón por la que no tienen ventanas. Ahora bien, el tamaño de del camarote interior de un crucero no es tan reducido como pueda parecer, estos tienen las mismas dimensiones que una habitación de hotel.
Crucero: camarote exterior
Los camarotes exteriores, son muy similares a los camarotes de interior, en cuanto a prestaciones y servicios se refiere. Las dimensiones son prácticamente las mismas, lo que cambia —no obstante— es su ubicación. Y es que estos camarotes se encuentran en los extremos de la cubierta, es por esta razón que cuentan con ventanas con vistas al mar. Debes tener en cuenta, no obstante, que estas ventanas —en la mayoría de los casos no pueden abrirse—, aunque cumplen con una función muy importante para ayudar a que entre la luz. Los camarotes de exterior suelen ser un poco más caros que los interiores.
Crucero: camarote exterior con balcón
Se trata de uno de los camarotes más demandados por los amantes de los cruceros. Y es que este tipo de camarote destaca por contar con un balcón privado para los huéspedes. Son camarotes más grandes que los anteriores —cosa que no es de extrañar teniendo en cuenta que dispone de un pequeño balcón privado donde tumbarse a tomar el sol, relajarse y tomar una copa—. Como es obvio, el precio de los camarotes con balcón es superior al de los anteriores tipos de camarotes en cruceros, aunque en ocasiones pueden encontrarse ofertas realmente atractivas para este tipo de habitaciones.
Crucero: camarote tipo suite
Son los camarotes más grandes del barco, aunque sus plazas son más limitadas. Estos camarotes son denominados por algunas navieras como “camarotes de categoría superior”. Este tipo de camarotes varía mucho entre uno y otro, dependiendo de cada naviera. Eso sí, todos ellos cuentan con una terraza de grandes dimensiones y con privacidad, así como otro tipo de servicios. Podemos encontrar camarotes tipo suite que van desde los 30 m2 hasta otros que llegan a los 230 m2, como el Royal Loft Suite —de Royal Carribean—. Este último es uno de los más populares debido a que cuenta con dos plantas, una habitación master con baño en la planta superior, salón, comedor, biblioteca, piano de cola… Por supuesto, el precio de los camarotes tipo suite es mucho más elevado, lo que los convierte en habitaciones demandas únicamente por los clientes más selectos.
Qué camarote elegir en un crucero
La elección de un camarote no es cualquier cosa. Es importante tener en cuenta algunas cuestiones como el presupuesto que tenemos disponible, las dimensiones de la habitación, la ubicación del mismo… Nuestra recomendación es que te fijes en lo siguiente:
- Evita los lugares concurridos: Algunos camarotes pueden estar ubicados en lugares concurridos o ruidosos, como pueden ser los ascensores, la lavandería, las salidas a cubierta o escaleras, la zona de ocio, los restaurantes y bares o la zona de fiesta… Te recomendamos que consigas un plano de la cubierta para poder comprobar donde se encuentra cada uno de estos elementos y decidas en base a ello.
- Evita los camarotes que van debajo de la cubierta de paseo: Algunos cruceros cuentan con zonas de jogging en las cuales los amantes del deporte pueden salir a correr mientras disfrutan de las vistas al mar. Sin embargo, las pisadas de los corredores pueden escucharse desde los camarotes, al igual que ocurre con la tripulación cuando coloca las tumbonas por la mañana, por ello, es mejor evitar estas habitaciones.
- Si te mareas: En el caso de que te marees, lo más recomendado es elegir un camarote ubicado en la mitad de la cubierta, lo más cerca de la línea de flotación, puesto que los movimientos son menos perceptibles.
- Si te agobias: En ese caso, evita a toda costa los camarotes interiores y opta por uno con ventana exterior o con balcón.
- En función del presupuesto: Dependiendo de cuál sea tu presupuesto, podrás optar por un tipo de camarote u otro. Te recomendamos, en cualquier caso, que estés atento a las ofertas que puedes encontrar. Muchas de ellas se aplican a camarotes exteriores con vistas al océano. Ahora bien, si lo que quieres es ahorrar al máximo, entonces decántate por alguna de las habitaciones de interior.
